Templos y morada | Letra alabanza cristiana
Estrofa I
Está golpeando, abre la puerta de tú corazón
Está tocando, si quieres puedes tú abrir.
Él con ternura, te dice yo estoy a la puerta y si le abrimos, cenaremos con él
Es que no sientes, que está en aire su presencia como el estruendo de muchas aguas turbulentas
Coro
Pero al entrar en mí, solo me invade el gozo.
Se humedecen mis ojos y comienzo a llorar.
Somos templos y moradas, apartados en santidad,
para él esperando su venida, que añoramos día a día para estar con él
Porque nada de este mundo se compara con lo hermoso de servirle a él,
de alabarle, de cantarle a mi rey
Estrofa 2
Está en el aire, una presencia muy hermosa
Es poderosa, que no me puedo resistir corre por mi interior,
como lo dice la escritura y al estallar sólo te puedo alabar con esta entonación,
que nace dentro de mi alma para mi dios, que sólo pudo darme calma
Coro II
Y más allá de las estrellas seguiremos
Alabando por siempre al cordero de Dios.
De Dios somos templos y moradas, apartados en santidad,
para él esperando su venida, que añoramos día a día para estar con él
Porque nada de este mundo se compara con lo hermoso de servirle a él,
de alabarle, de cantarle a mi rey